martes, 10 de septiembre de 2013

Cronica del triatlon de Zumaia.

Después de un verano donde no he parado, pero casi lo único que he entrenado ha sido la bici, me presentaba en la línea de salida del triatlón sprint de Zumaia. Justo los 2 días anteriores me había metido a la piscina para nadar algo. Tenía en mente lo del año pasado, que era salir y en línea recta con una fuerte corriente a favor, eso me venía bien. Según llego a Zumaia me dan la mala noticia, el recorrido de natación se ha cambiado, toca subir un poco y luego vuelta, de la corriente nada de nada. Sin más, toca salir y a lo que se pueda.

Tras dejar todo preparado nos plantamos en la salida, unos 200-300m hasta la boya donde va a ser la guerra. Salida y es imposible nadar, golpes y más golpes, muchos tragos y sin poder nadar en condiciones. Hacía mucho que no me sentía tan incómodo nadando. Las dos boyas por fuera para evitar más los golpes y a la vuelta me meto demasiado hacia el centro penalizando. No voy nada cómodo pero es lo que toca. Salida y toca la bici, buena transición y nos juntamos un grupo bueno, de unos 15-20 pero los relevos son cosa de 4, como siempre. Voy cómodo, puedo salir a cualquier aceleración y con sensación de fuerza. Llegando a Aizarnazabal nos cruzamos con un enorme grupo, pero es inalcanzable. Por detrás viene otro grupo importante que unos km más adelante se une a nosotros. Seguimos relevando pero sin mucha organización, a falta de 3km, en el repecho de Oikia decido probarme. Arranco del grupo y me voy solo, me pasa otro como una moto y alguno llevo a rueda pero el grupo se ha roto. Antes de terminar el repecho, ya he cazado al de la "moto" y vamos 3-4 hacia la transición, pero justo antes de la transición nos pilla de nuevo el grupo. Me atasco un poco con las zapatillas y salgo a correr.

No llevo reloj y la intención es ir a tope, primer km y paso a Ramon que va tranquilo, no llevo buenas sensaciones, voy ahogado pero entre el km 2-3 le doy la vuelta. Me pasa uno de Azkoitia que ve a 3 de su equipo unos metros por delante y su ritmo es alto. Me uno a él y vamos adelantando a sus "coequipiers", término fuerte dándolo todo para llegar a meta.

Buenas sensaciones en bici y también durante la carrera a pie, aunque luego el tiempo oficial diga que he corrido a 3:50 y eso me desilusiona un poco. Este domingo toca olímpica en Donosti, veremos qué tal se nos da

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